El nombre de la nueva fiscal General de la Nación es Luz Adriana Camargo, mujer que dirigirá los destinos de la entidad que ejerce la acción penal y la persecución del delito en Colombia. Su nombre podría simbolizar el cuatrienio de la luz en el ente acusador.
Los nombres son el resultado de distintas circunstancias y contextos, colocados por nuestros padres en homenaje a nuestros familiares, amigos, personajes, santos, profetas, en fin, un sin número de variables que intervienen en la sustantivación de nuestra identidad, empero, podrían representar misiones de vida, identificaciones espirituales, compromisos con la sociedad, u otras circunstancias o vínculos.
Las casualidades en ocasiones suelen convertirse en causalidades, desde luego producto de energías metafísicas o voluntades humanas, pudiendo coincidir con realidades, tal, podría ser el nombre de la nueva fiscal, que, aunque suene chistoso, su nombre y apellidos serían indicadores de claridad, por cuanto sus conocimientos, liderazgo, compromiso expresados en el acto de su posesión, representarían resplandeciente ignición iluminada, de una esperada transformación institucional y humana de la entidad.
La ética pública, la ética social, extraviadas en el Estado y sectores de la sociedad colombiana en avanzada pérdida de principios y valores, con resultados catastróficos en la vida institucional y social del país serían , si se cumplen los propósitos de la nueva fiscal, un modelo ético en el ejercicio de la acción penal, aspiraciones e intenciones trascendentales, que alimentan el alma, recrean la mente, e ilusionan el espíritu de los colombianos.
Este compromiso moral de la fiscal general me recuerdan la sentencia de Giles Lipovetsky cuando profetizó “el siglo XXI será ético o no será”, llamado para que la sociedad civil y el Estado recuperen los principios y los valores perdidos para que prevalezca el predominio de la justicia, de la convivencia, de la paz, ejes centrales del liderazgo y la gerencia propuesta por la nueva fiscal.
La fiscalía, los fiscales, en este cuatrienio podrían ser líderes éticos, gerentes del orden jurídico en la investigación penal “para la transformación de la vida de millones de compatriotas a quienes por cuenta de la violencia, la criminalidad, la impunidad, se les ha afectado la vida”, tal como lo expresara la fiscal Luz Adriana Camargo.
La ambiciosa ruta transformadora de la Fiscalía General de la Nación implica independencia, imparcialidad, aplicación de la ley en condiciones de igualdad, priorización con “ enfoque territorial, fortalecimiento y análisis criminal como elemento básico del contexto, análisis financiero, para seguir las rutas del dinero ´ilícito, sistema de alertas tempranas, instrumentalización de la inteligencia artificial y atención de las rutas de atención a las víctimas”, ratificó la electa fiscal.
Estas tranquilizadoras propuestas se convierten en un nuevo sueño, en gigantesco reto de la fiscal Luz Adriana Camargo, de brindar un buen servicio al ciudadano para lo cual la sociedad debe rodearla para que tengamos un mejor país.
Adiciones
1. Rechazo absoluto al asesinato de líderes sociales, veedores, en especial del abogado Jaime Vázquez en Cúcuta. Solo pedimos pronta y cumplida justicia, sanciones ejemplares para los autores materiales e intelectuales.
2. Rechazo absoluto a la salvaje barbaridad policial al abogado Lenín Bustos, electrocutado con una pistola Taxer por verdaderos criminales vestidos de verde, en Yopal Casanare, sin que éste haya estado armado, ni haya agredido o atacado a la Policía, tal cual se observa en los videos publicados en una cadena radial nacional.
3. Rechazo a los ultrajes de que fue víctima en Cartagena el 5 de abril el reportero gráfico del periódico El Universal.
4. Llamado a la Unidad Nacional de protección para que sin tanta tramitomanía proteja la vida de los abogados y veedores en riesgo.
5. Presidente Gustavo Petro, en la Colombia potencia mundial de la vida es deber de las autoridades evitar que las cosas pasen, la prevención es el camino.
Abogado Representante legal Veeduría Colombia Decente.
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