Capturan a 8 por el atentado del ELN a escuela de Policía

Ocho capturados, empresas de lácteos para lavar los dineros del atentado, transacciones por $2.200 millones y nueve bienes incautados por valor de $2 mil millones dejó el gigantesco operativo desarrollado en cuatro zonas del país por parte de la Fiscalía y la Policía, cuyos resultados más importantes fueron anunciados este jueves, tras el carro bomba que el 17 de enero de 2019 dejó 22 cadetes de la Policía muertos en la Escuela General Santander. 

El anuncio se hizo antes del mediodía en la Casa de Nariño, donde el presidente Iván Duque recordó que "al momento del atentado a la Escuela General Santander se logró establecer que los autores eran del ELN. Hoy en un trabajo de la Fiscalía y la Policía se ha dado con la captura de varios integrantes de esa célula terrorista".

Advirtió además el jefe de Estado que este resultado "evidencia el vínculo directo del COCE (Comando Central del ELN) en la planeación y ejecución de este atentado".

Acto seguido, el fiscal Francisco Barbosa reportó: "Hoy no solo golpeamos una estructura sino grupos que financiaron estos atentados. Se logró la captura de ocho personas que participaron en la planeación, financiación y ejecución del atentado, se impactó el patrimonio ilícito que abastecía de recursos al ELN para realizar atentados como este y se ocuparon nueve bienes entre inmuebles, sociedades, establecimientos de comercio y vehículos".

El jefe del ente acusador dio a conocer en su informe las identidades y los señalamientos contra cada detenido: "Los capturados son Andrés Felipe Oviedo Espinel, alias Jesús, quien habría recibido órdenes directas del COCE para planificar las actividades; Carlos Arturo Marín Ríos, alias Marín, señalado de escoltar en motocicleta la camioneta que fue usada en el atentado; Angie Lorena Solano Cortes, alias Maco, a quien la evidencia la involucra en el acompañamiento en motocicleta del vehículo activado; Miguel Antonio Castillo Rodríguez, alias Toño, propietario de dos empresas de producción y distribución de quesos, ubicadas en Arauca y Bogotá, que habrían servido para financiar la acción ilegal. Essta persona es investigada por servir de testaferro y legalizar dinero productos de extorsiones y secuestros en Arauca y Cundinamarca".

Así mismo, agregó Barbosa, "Angie Daniela Martínez Buitrago, alias Dani, quien entre 2011 y 2019 habria recibido altas sumas de dinero y las consignó en dos cuentas de la red del ELN vinculada al atentado. Las transferencias ascienden a $1.500 millones. Alias Dani era empleada del establecimiento de lacteos El Arauqueño, cuyo propietario es Álvaro José Mateus Vargas, alias El Quesero, procesado también por el atentado; Jessica Katherine Barrientos, alias Jessica, integrante de la comisión de finanzas del Frente de Guerra Oriental del ELN; Carlos Felipe Mateus Vargas, alias Carlitos y Luis Sebastián Mateus Vargas, alias Sebas, hermanos de El Quesero y responsables de actividades de lavado de activos".

Indicó además el funcionario que a estas personas se les incautaron prendas de uso privativo de las Fuerzas Militares y que deberán responder por delitos contra las personas y bienes protegidos por el DIH. Los delitos, añadió, son los de homicidio en persona protegida en concurso homogéneo por la muerte de los 22 cadetes, con una pena de entre 40 y 50 años; tentativa de homicidio en persona protegida en concurso homogéneo por los 89 heridos; actos de terrorismo, financiamiento al terrorismo, lavado de activos, enriquecimiento ilícito y rebelión.

"Habrá nueva imputación contra Álvaro José Mateus Vargas, alias El Quesero, por los delitos de homicidio en persona protegida y actos de terrorismo", explicó el fiscal. Este hombre, capturado en mayo de 2019, fue condenado a finales del año pasado por un juez de Yopal (Casanare) a más de ocho años de prisión por los delitos de rebelión, concierto para delinquir agravado, y financiación del terrorismo y de grupos de delincuencia organizada.

Según el titular del organismo de investigación, fueron identificadas bases financieras del Frente de Guerra Oriental del ELN, que abasteció recursos, armas, explosivos, prendas de uso oficial y droga a las milicias urbanas y a diferentes estructuras ilegales en Arauca y zona de frontera con Venezuela.

De igual forma, se afectan nueve bienes con extinción de dominio, y se puso fin a una actividad de venta de lácteos que habria servido para actividades de inteligencia y adquisición de medios logísticos para el atentado.

Se trata de la Sociedad Inversiones y Comercializadora Aldama S.A.S., registrada como una empresa dedicada a la distribución de productos lácteos; cuatro establecimientos de comercio: Lácteos Villa Yulita, Quesera Los Andes, Distriquesos F.F y Lácteos Villa Esperanza y cuatro vehículos.

Las diligencias de adelantaron en Bogotá, Zipaquirá (Cundinamarca), Manizales y en el corregimiento de Esmeralda en Arauquita (Arauca).

Entre tanto, señaló Barbosa, "las propiedades afectadas son varias sociedades, cuatro establecimientos de comercio y cuatro vehículos. El valor de los bienes asciende a más de $2 mil millones y la empresa que fue utilizada para acondicionar el vehículo que explotó fue la Empresa Social Quesera de los Andes, ubicada en el barrio capitalino de El Carmen. Además, se rastrearon transacciones por más de $2.200 millones, sin soportes contables".

Así mismo, figura la omisión de declaración de impuestos ante la DIAN por un valor de $100 millones.

Por su parte, el director de la Policía, general Óscar Atehortúa, indicó: "Realizamos más de 1.800 actividades de investigación criminal, analizamos más de 50 mil audios, más de 3.800 horas de llamadas, 240 horas de video, y hemos aportado 500 materiales probatorios a la Fiscalía".

Precisó que en el plan del atentado "hubo tres grupos: uno se dedicó a la ejecución del acto terrorista, otro para el soporte logístico y los demás que permitieron conseguir los recursos ilegalmente para sostener la operación".

Agregó el alto oficial sobre los detenidos que "alias Jesús desde 2009 hacia parte del Grupo Llamaradas Mentes Libertarias, y recibió de Culebro Viejo, mano derecha de alias Pablito, del COCE, las instrucciones para coordinar las actividades terroristas. Este sujeto daba instrucción en las escuelas de entrenamiento guerrillero sobre vigilancia y contravigilancia, seguimientos e interrogatorios, era experto en evadir vigilancia".

De igual forma, afirmó que "alias Maco también hacia parte del grupo Llamaradas Mentes Libertarias, y  ambos podrían estar vinculados a hechos terroristas en Bogotá en los últimos ocho años".

La financiación del atentado, reiteró, "corrió por parte de El Quesero, y mientras Jessica vendía lácteos, desarrolló también actvidades de observación en la Escuela y habría alojado a uno de los miembros de la acción terrorista en su propio apartamento".

Recordó además los sujetos que ya habían sido capturados por estos hechos: "Wilson Arévalo, quien compró el vehículo y lo trajo a Bogotá fue detenido el 30 de enero de 2019; Ricardo Carvajal está detenido también desde el año pasado; José Daniel Novoa vendió la motocicleta que actuó el año anterior como acompañamiento del vehículo, y la compró José Eusebio Sánchez, ambos fueron procesados".

La Policía resaltó en un comunicado que de las actividades investigativas participaron además la Dijín y la Interpol, y que también hubo diligencias en Tuta (Boyacá).

Se lee también que alias Culebro Viejo, cabecilla del Frente de Guerra Oriental, quien dio las órdenes a Jesús, estaría en Venezuela y que sobre este sujeto se expidió en los últimos días una nueva orden de captura con notificación azul de Interpol. 

Alias Jesús y Marco fueron, según la Policía, los tripulantes de la motocicleta que escoltó el vehículo que transportó los explosivosdesde la bodega en la que se encontraba, en la localidad de Usme, hasta la Escuela General Santander. 

Alias Marín, se lee en el boletín policial, fue el encargado de conducir, desde el municipio de Zipaquirá (Cundinamarca) hasta Bogotá, la motocicleta utilizada para escoltar el automotor utilizado en la acción criminal.

Alias Dani, así mismo, era la "compañera sentimental de su propietario, el capturado Álvaro Mateus, y tenía acceso a toda la información financiera y terrorista de la red de apoyo al terrorismo del Frente de Guerra Oriental".

Los hermanos de El Quesero detenidos son alias Carlitos, quien estaría transportando entre Arauca y Bogotá dineros, armamento y explosivos para el Frente de Guerra Oriental y Sebas, exintegrante del ‘Cartel de los Suizos’, organización delincuencial desmantelada a finales de 2018 y que estaba dedicada al contrabando de productos lácteos desde Venezuela hacia Colombia. Igualmente, debido a su conocimiento en la comercialización de este tipo de mercancía, "Sebas estaría lavando dinero como persona natural a través de un establecimiento de comercio perteneciente a la estructura terrorista".

Finalmente, reportó la Policía que en la operación se incautaron 15 celulares, 5 computadores portátiles, 8 memorias, 2 
tablets, una cámara fotográfica, 50 cartuchos 99 mm para fogueo, $15 millones en efectivo y documentación alusiva a la ideología del ELN, entre otros elementos.