Los hechos fueron conocidos mediante un video publicado en las redes sociales del fotógrafo, en el que se registra el momento en el que los policías le informan la imposición de las sanciones y se muestra cómo uno de los uniformados intenta quitarle su celular a la fuerza.
Posteriormente, le solicitaron realizarle una requisa en su maleta donde guardaba su cámara. Paez refutó que el procedimiento no se estaba llevando a cabo de manera adecuada por lo que los uniformados procedieron a llevarlo a una oficina de Policía que, según él, no contaba con cámaras de seguridad ni iluminación.
“Me dice que entre y le dije que prendiera la luz y uno de ellos me respondió: "entra o lo entro". Luego me rapan el celular y me empiezan a pegar y me amenazan con llevarme a una URI. Con él también estaban otros auxiliares bachilleres" expresó.
Ante las persistentes amenazas de imponerle varios comparendos valiéndose de lo que dicta el Código de Policía, las autoridades pusieron el caso en investigación con el fin de esclarecer las cuasas del comportamiento de los uniformados, quienes tendrán que exponer sus razones ante la entidad.