Por LUZ BERENICE GUTIÉRREZ G
Nos iban a enloquecer las cadenas de mensajes, los videos de expertos, de científicos argentinos llevándole la contraria al resto y de los supuestos remedios milagrosos de médicos de Francia y de Cali. Con mi esposo hicimos el pacto de desechar reenvíos y cadenas de Whatsapp, para mirar solo portales de medios reconocidos e información del Ministerio de Salud y voceros oficiales. Con la familia, solo compartir información útil y no rumores.
Pero lo que no hemos podido parar y además no tenemos forma son las solicitudes desesperadas de ayuda de tanta gente que comercializa productos y tienen que cerrar sus establecimientos, nos parten el alma y ya no sabemos cómo darles una mano, el panorama es muy angustioso para ellos, sabemos que hay que cuidar la salud de todos, pero si no es por el coronavirus, es la angustia la que nos va a enfermar.
Puede que haya muchos que quieran creer esos cuentos de que esta crisis va a mejorar el mundo y va a volver a la gente más humana, no sé si eso irá a ser así, lo que veo es que hay mucha gente sufriendo.