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“Nací portero”: Aldair Quintana
El joven guardavalla, refuerzo de Nacional, quiere dejar huella.
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El arquero tolimense sumó 23 partidos como profesional en el Atlético Huila, de esos 18 en la Liga. Foto: Jaime Pérez Munévar
15 de julio de 2019
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Si un puesto en Nacional ha tenido referentes, ha sido el de arquero. Tal vez los máximos son René Higuita y Franco Armani, pero ahora llegó un joven de 25 años de edad y 1,95 metros de estatura que quiere hacer su propia historia en la portería verdolaga. Es tolimense y dice que desde que tuvo uso de razón se recuerda bajo los tres palos.
El COLOMBIANO dialogó con él sobre varios aspectos de su vida, luego de una positiva experiencia en el Atlético Huila, que lo trajo hasta el cuadro antioqueño por recomendación del técnico Juan Carlos Osorio. Respeta a su compañero José Fernando Cuadrado con el que competirá este semestre, sanamente, por la posición.
¿Cómo llegó al fútbol?
“Inicié en Ibagué, en la escuela de la que salió James (Rodríguez), me llevó mi papá que también fue jugador”.
¿Cuándo se decidió por el puesto de portero?
“Desde pequeño siempre me gustó el arco, desde que tengo uso de razón me veo dentro de los tres palos. Fue siempre lo que me gustó”.
¿A quiénes admiraba en su niñez?
“Veía mucho a Óscar Córdoba cuando estaba en Boca Juniors, y creo que en gran parte me decidí por la portería gracias a él”.
Usted es un portero qué sabe con el balón en los pies, ¿cómo lo aprendió?
“Eso es a raíz del trabajo, todos los días intento mejorar y crecer en mi profesión, y así poco a poco he ido perfeccionando esa condición”.
¿Cómo está conformada su familia?
“Mis padres, tengo muchos tíos, mis abuelos, dos bisabuelas y dos hermanos por parte de mi papá, él se llama René Quintana y mi mamá Francy Rojas”.
¿Su papá fue futbolista, dónde jugó?
“Lo hizo en Tolima, aunque no por mucho tiempo, jugaba de defensa central”.
¿Un momento difícil de superar hasta acá?
“Haber salido de corta edad de la casa, tenía 15 años, pero eso también me sirvió mucho para lo que quería, que era ser jugador de fútbol. Primero me fui a Bogotá y después estuve tres años en Argentina”.
¿Y con quién se quedó?
“En Bogotá, con un familiar que vivía allá, y en Argentina llegué por medio del padre de Falcao García (q.e.p.d.), él me ubicó allá y cuando pude quedarme con River Plate vivía en la pensión del equipo”.
Usted también estuvo en el Medellín, cuéntenos esa historia...
“Cuando llegué de Argentina, por medio de un utilero del Medellín que era conocido del dueño, se me abrió la puerta de llegar a ese equipo. Vine, me probé y quedé. Empecé a jugar con la categoría sub-20 en la Liga Antioqueña de Fútbol, pero finalmente me subieron al equipo profesional. Después no me dieron la oportunidad y me tocó buscar otro camino”.
¿Quién era el técnico del DIM en aquel momento?
“En el equipo profesional estaba Hernán Torres. Fui a préstamo al Atlético, de la B, y cuando regresé ya estaba el profe Leonel (Álvarez)”.
¿Quién le dio el mejor consejo en el fútbol y en la vida?
“Mis padres han sido fundamentales en mi vida, siempre me han apoyado en los momentos más complicados de mi carrera, incluso, cuando estuve a punto de tirar la toalla, siempre han estado ahí para darme fuerzas. Pero hay un consejo que me dio Alexis Viera, el portero quien fue víctima de un hecho de violencia, con el que compartí en el Atlético. Él me dijo que por muy bien que estén las cosas, nunca me crea más que nadie y que mantenga los pies en la tierra porque la vida te puede cambiar en un minuto”.
¿Quién le dio la oportunidad para que se consolidara en el Huila?
“Llegué a Huila el año pasado a raíz de la lesión de Bréiner Castillo con el profe Néstor Craviotto, y en el segundo semestre jugué algunos partidos de Liga y Copa y así me gané la titularidad. Gracias a Dios las cosas me salieron bien”.
Al profesor Juan Carlos Osorio le gustan los jugadores casados, ¿usted como va en ese aspecto?
“(Risas) no, yo todavía estoy soltero”.
¿Cuáles son sus anhelos?
“A corto plazo quiero ser campeón con Nacional. Siempre he querido lograr un título y estando acá se puede dar esta linda oportunidad. Ya a mediano y largo plazo, ser parte de la Selección Colombia y, por qué no, jugar en el fútbol europeo, en el extranjero”.
¿Si el fútbol no hubiera sido su carrera, qué sería hoy?
“No sé, creo que hubiera sido basquetbolista por mi estatura. La verdad es que no lo he jugado pero me gusta mucho como espectador”.
¿Cómo aprovecha el tiempo libre?
“Me gusta descansar, ir al gimnasio y también la lectura. Soy muy casero”.
¿Algún libro recomendado?
“Uno que estoy leyendo ahora que trata sobre el técnico Alex Ferguson. Se llama Liderazgo y habla sobre las anécdotas que ha tenido Ferguson en su carrera, todos los jugadores con los que ha compartido y gira alrededor de esos hechos”.
Osorio incidió mucho en su llegada, ¿qué le ha dicho?
“El profe me ha recibido muy bien, me ha dado mucha confianza. Me dijo que yo venía a reforzar la portería y a tener una competencia sana. A él le gusta tener dos o tres jugadores por posición para que compitamos, nos exijamos, crezcamos y así mejorar el nivel colectivo. Estoy feliz de que él se haya fijado en mí”.
Ya estuvo en el Atanasio en el amistoso con Lanús, ¿cómo fue esa sensación?
“Excelente, muy contento, porque había un ambiente lindo. Al principio estaba un poco ansioso por querer hacer las cosas bien, pero a medida que fueron pasando los minutos me fui tomando confianza y fue más fácil estar en la cancha”.
¿Qué opina de José Fernando Cuadrado, su compañero de posición?
“Me ha recibido muy bien; es una gran persona y todo un caballero. Es muy profesional y lo admiro mucho porque lleva bastante tiempo manteniéndose en el fútbol colombiano y espero poder aprenderle bastante” n
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